domingo, agosto 05, 2012

Ana anda de gira: Día 6

Jueves.
Fue un día muy prometedor que terminó siendo muy cumplidor.
Nuevamente tuvimos que estar puntuales a las 9 am en el lobby del hotel de donde partiríamos a la oficina de asuntos gay, lésbicos y transgéneros del Alcalde/Jefe de Gobierno de DC. Voy a ser honesta, casi me da el patatuz en la oficina dichosa cuando la cita que debía de ser de 9:30 am a 10:30, terminó por iniciar a las 10:15 am. El retraso de 45 minutos se debió a que el jefe de departamento tuvo un malentendido de espacios y nos esperaba en otro edificio. (Esto ha resultado más común de lo que yo creería.) Como quiera, la espera bien valió la pena. Jeffrey Richardson es un hombre lindísimo, muy amable comunicativo y maravilloso. Nos dio un mega tour por todo el edificio. Nos presentó a la persona a cargo del programa de ciudades amigas. Nos pasaron hasta el cuarto especial donde reciben a los embajadores de otros países. Terminó por ofrecernos una salida nocturna el mismo día. No sólo eso, también prometió presentarnos a algunos de sus amigos. Finalmente la reunión fue tan fructífera que nos extendimos más de la hora y luego por poco nos quedamos sin tiempo para comer.
Aquí estamos en el salón para recibir las visitas de los diplomáticos que vienen de otros países para hablar con el alcalde.
Lo bueno fue que Rodrigo, nuestro chofer propuso llevarnos a un lugar tipo buffet donde te cobran según el peso de lo que consumas que es rápido, rico y accesible. Como mencioné la última vez, hay algunas almas que prefieren ya no gastar por temor a quedarse sin fondos para los días subsecuentes. Yo soy una de esas almas.
Tras la comida podría resumirlo como "no me pregunten qué pasó" porque con el sueño que me da después de comer, apenas y podía poner atención. Fuimos al National Gay and Lesbian Task Force. Fue dentro de un edificio de como 10 pisos donde hay 8 asociasiones LGBT. La organización trata de empoderar a la comunidad mediante entrenamientos, análisis político y apoyo para contrarestar los esfuerzos de la derecha por bloquear los derechos de nuestra comunidad.
Al salir del National Gay and Lesbian Task Force nos tomamos la ya tradicional foto de grupo.

Al terminar nuestra cita en la National Gay Lesbian Task Force pudimos regresar al hotel un rato para tomar una siesta, bañarnos, en fin, qué se yo. Cada cuál tenía ya sus propias necesidades. Yo por ejemplo estaba urgida por tomar una siesta (una sestita como dice mi Sampi bello).
Apenas puse la cabeza en la almohada y me vi perdida. Desperté justo unos minutos antes de que tuviéramos que bajar de nuevo al lobby. Me arreglé tan mona como pude por aquello de que después
íbamos a salir con Jeff y sus amigos. Antes, por supuesto, fuimos al proyecto de memoria latino: Latino GLBT History Project. El fundador del proyecto es muy simpático. Nació en Reynosa y se crió en Monterrey. Desde ahí se fue a mediados de los ochenta a Estados Unidos. Él describe que le tocó ver morir a muchos amigos de aquel entonces por la epidemia de VIH y el desconocimiento ante la misma. Cuenta que incluso había
veces que morían uno tras otro cada mes y él sufrió mucho la pérdida. Fue la falta de visibilidad de gente gay latina lo que lo impulsó a comenzar su trabajo en el activismo LGBT en los Estados Unidos.
Me dejó contenta y motivada la visita puesto que demuestra que incluso cuando empiezas con poco o nada, con esfuerzo se pueden lograr los cambios necesarios.
En la tarde noche, corriendo, pero puntuales, llegamos a las 7:45 pm con Jeff a un bar que se llama Number Nine, lo más nuevo y chic de bares gays en DC. Es como si nos hubieran llevado a antrear a la Condesa, la verdad no era el hit de la mayoría que somos ccomo más bien guarrosos, pero se nos quitó lo cortados después de la ronda de Martinis Cosmopolitan que nos invitó a todos.
La noche siguió muy divertida y la coronamos con una visita al Eagle Bars. Es como un punto de reunión para hombres grandes, peludos, tipos osos. Algunos se fueron antes y atros hasta después. Yo claudiqué a las 2:30 am, momento en qyee me fui a dormir al hotel.
Y luego obvio moría de sueño...

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