Hace unos días llamé a Monterrey para hablar con Ana y a mitad de la conversación tuvo que dejarme esperando porque una trifulca entre Diego y Santiago se suscitó. Después de las negociaciones, Ana les preguntó si querían hablar conmigo y Diego no quiso porque estaba enojado porque ya quería irse al cuarto a dormir. Pero Sampi sí quiso. Y así sucedió la conversación:
Sampi: Meno
Mamá: Hola, Sampi, cómo estás?
Sampi: Hola... Bie
(Mami: Cuéntale que fuiste con el Tío Manuel)
Mamá: ¿Fuiste con el Tío Manuel?
Sampi: Ti
(Mami: Cuéntale que abrieron el refrigerador)
Mamá: ¿Jugaron con el refrigerador?
Sampi: Sí
Mamá: ¿Y qué sacaron?
Sampi: Sacamos los huevitos
Mamá: ¿Sacaron los huevitos? Pero Sampi, por qué sacaron los huevitos.
Sampi: Poque poque sacamos los huevitos
Mamá: Pero Sampi, los huevitos no son para jugar, son para comer.
Sampi: Nooo, ¿po qué?
Mamá: ¡Pos porque son para comer!
Y he ahí la conversación en donde le traté de explicar a mi hijo que sus investigaciones o sus juegos o como quiera que se le llame a eso de andar explorando en el refrigerador dudo mucho que le hayan parecido chistosas al Tío Manuel. Yo nada más de imaginar que tres gnomos (Manuelito, Diego y Santiago) a punto de cumplir tres años estaban jugando con un cartón de huevos me pone, paradójicamente, la piel de gallina.
En fin, luego de los alegatos de Santiago, Ana le dijo que se despidiera y con un "Mena Noche Mamá" le regresó el teléfono a Ana.
Mi Sampi precioso.
Sampi: Meno
Mamá: Hola, Sampi, cómo estás?
Sampi: Hola... Bie
(Mami: Cuéntale que fuiste con el Tío Manuel)
Mamá: ¿Fuiste con el Tío Manuel?
Sampi: Ti
(Mami: Cuéntale que abrieron el refrigerador)
Mamá: ¿Jugaron con el refrigerador?
Sampi: Sí
Mamá: ¿Y qué sacaron?
Sampi: Sacamos los huevitos
Mamá: ¿Sacaron los huevitos? Pero Sampi, por qué sacaron los huevitos.
Sampi: Poque poque sacamos los huevitos
Mamá: Pero Sampi, los huevitos no son para jugar, son para comer.
Sampi: Nooo, ¿po qué?
Mamá: ¡Pos porque son para comer!
Y he ahí la conversación en donde le traté de explicar a mi hijo que sus investigaciones o sus juegos o como quiera que se le llame a eso de andar explorando en el refrigerador dudo mucho que le hayan parecido chistosas al Tío Manuel. Yo nada más de imaginar que tres gnomos (Manuelito, Diego y Santiago) a punto de cumplir tres años estaban jugando con un cartón de huevos me pone, paradójicamente, la piel de gallina.
En fin, luego de los alegatos de Santiago, Ana le dijo que se despidiera y con un "Mena Noche Mamá" le regresó el teléfono a Ana.
Mi Sampi precioso.
3 comentarios:
Preciosos, como sus mamás.
Saludos a los 4!!! Poco a poco las situaciones se volverán más simpáticas aunque a veces no lo parezca.
Qué bueno que están disfrutando cada momento... y es que ¡crecen tan rápido!
AH ps yo me acuerdo que ustedes también juegan con los huevitos de Pascua, hasta su abuelito pintó unos, por éso el pensó que eran para ésopara jugar creo yo.
Me encantan las historias de su blog.
¡Saludos !!
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