Alejandra de apenas 2 años de edad tan sólo llevaba 3 semanas de haber iniciado clases en el colegio The Hills Institute cuando fue expulsada por el sólo hecho de tener dos padres en lugar de un papá y una mamá. Alex y Pepe son procedentes de Nuevo Laredo y tenian 8 meses viviendo en Monterrey, cuando vieron que la Misión y Visión de esta escuela se econtraba el respeto a la diversidad
no dudador en inscribir a su hija.
Una vez que fue inscrita ambos padres se presentaron en la escuela para el open house en donde conocieron al personal docente y a otros padres de familia sin que existira algún problema. El tercer día de clases aún no terminada cuando Alex fue llamado por la directora de la escuela, Patricia Durán, para informarle que dada la situación de su familia la escuela no iba a permitir la permanencia de su hija en esta ya que sus dueños eran homófobos.
Durán le ofreció a Alex la oportunidad de dejar a su hija en la escuela siempre y cuando pidera una disculpa pública y se comprometira a firmar una carta en la que se estipulaban condicionamientos como renunciar a presentarse como familia, abstenerse de hacer comentarios fuera de lugar a otro padre sobre su situación, no asistir al evento del 10 de mayo, presentarse a todos los eventos de manera individual como padre soltero y comprometerse a la inasistencia de Pepe a la institución. Alex se negó rotundamente a firmar la carta y la directora señalo que en unos días le informarían si su hija podría seguir en la escuela o no.
“Pepe tenía que ser completamente ausente de la vida escolar de nuestra hija y básicamente ella quería que yo ejerciera como un papá soltero, el cual no soy”, menciona Alex.
El matrimonio no dudó en buscar apoyo de atoridades estatales y federales. “La Conapred intervino inmediatamente, incluso la SEP también nos recibió para ver si podíamos conciliar antes de la siguiente cita con la escuela”, relata Pepe, quien ha tenido que permanecer al margen de la situación por no ser el padre adoptivo de Alejandra.
Tres semanas después del suceso Alex fue citado en la institución con la advertencia de que tenían que llegar a la cita el papá y la mamá de Alejandra. Cuando llegaron a la escuela les cerraron las puertas y una empleada acompañada de un guardia de seguridad les informo que Alejandra estaba expulsada de la institución y que ellos no podían entrar.
Al solicitar la devolución de su dinero y de los materiales de la niña la escuela sólo les entregó un cheque con el 70% de los gastos erogados y días después eliminaron de su Misión y Visión lo referente a la diversidad en su escuela.
El matrimonio ha recibido extensas muestra de apoyo por parte de los padres de familia de la escuela quienes señalaron desconocer el caso.
1 comentario:
Acojonante lo retrógrados que pueden ser algunos seres "humanos". Sólo faltaba que nadie le tuviera que decir a esta gente lo que es ó no familia.
Hay quien aún no se ha dado cuenta de que estamos en el siglo XXI.
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