Su propuesta tiene repercusión negativa en mi vida, limitándome, mermando de forma directa mi crecimiento humano y espiritual. Palabras de Héctor Patiño a la Senadora @MakiOrtizD.
Guadalajara, Jalisco a 30/Diciembre/2012.
Atención Senadora Maki Esther Ortiz Domínguez.
Jamás he cuestionado las decisiones de las personas que están al cargo de nuestro país y de nuestras leyes, que se encuentran en dicho lugar bajo nuestra propia elección por el acto aquel al que llamamos democracia, por tal motivo siempre entendí que lo que se hiciera era por el bien de la población pese a que de pronto no compaginara con sus ideas de cambio. En esta ocasión me siento incomodo al pensar en que se realice la especificación en la ley de reproducción asistida donde se propone que sea solamente para parejas legalmente casadas o en concubinato demostrado y que cuenten con un certificado médico de infertilidad. Está de más a estas alturas de mi vida especificar los motivos por los cuales no se encuentra dentro de mi plan de vida el matrimonio, sin embargo esto no significa que no tenga dentro de mi mente, corazón, consciencia, planes de vida y de realización como persona y humano el tener un hijo. Los 28 años de mi vida me he movido en el mundo en el que nací bajo principios morales y de ética, siempre con un gran respeto por las demás personas y por mí mismo, con el gran valor de la responsabilidad a todo lo que comprende mi vida, aprendiendo a cada paso que doy, afianzando siempre un nuevo aprendizaje, superándome y luchando de forma incansable por ser una persona ejemplar, he mantenido relación cordial con las personas que me rodean, y profesionalmente lo puedo decir también, la muestra es que a mis 28 años tengo el orgullo de decir que desde hace 2 años soy un médico especialista. Me queda claro que lo que soy, lo debo al camino que recorrí siempre con el respaldo de mi familia quienes me animaban a seguir siempre adelante con valores y principios para nada intercambiables por algún otro parecer. Al conocer la historia de un muy buen amigo quien tuvo ya la oportunidad de concebir su hijo por reproducción asistida (sin estar casado y sin tener pareja) se encendió en mi esa esperanza de que a mi vida llegará el ser al que juro amar sin medida y proteger con todas mis fuerzas y toda mi voluntad hasta que la misma muerte me lo impida, porque sé que lo que tengo y lo que soy será para él, juro hacer de quien sea mi hijo el niño más feliz del mundo (como todo padre consciente lo haría), y porque sé que mi familia quien me hizo llegar a la cima de mi vida continuarán por medio de mi y por cuenta de ellos sembrando ese amor propio, a Dios, a los demás y a la vida misma en mi hijo, de ellos es de quienes más apoyo he recibido en el entendido que la reproducción asistida es una opción viable, factible y sana por medio de la cual puedo llegar a concebir a mi hijo, y reitero, su apoyo es incondicional, entendiendo que de esta forma a nadie voy a dañar, a nadie voy a mentir, ni estafar, robar, calumniar y no pretendo tapar el sol con un dedo concurriendo a falsos matrimonios planeados con intención de lograr de forma egoísta mi meta, finalmente todo este proceso lo tenemos planeado con toda la transparencia del mundo, porque de esto nadie tiene por qué temer o sentirse avergonzado, tengo todo bien en claro, ha sido una idea que he venido elaborando en 2 años, porque estoy cierto que este tipo de decisión no se toma a la ligera. Por todo lo anterior me atrevo a decir que la propuesta que realiza tiene repercusión negativa en mi vida, limitándome, mermando de forma directa mi crecimiento humano y espiritualcon el ser que mas amaré en mi vida, cuando de entrada lo he deseado hacer por la vía y medio correcto, hago la invitación a no cerrar puertas sin antes ver las buenas opciones que se encuentran detrás de ellas, tomar conciencia que lo común no nos da la certeza de lo correcto, y que lo infrecuente ó alternativo puede generarnos mayores beneficios que los paradigmas que tenemos por tradición. Deseando quede clara mi invitación y solicitud le deseo un gran 2013 llena de bendiciones en compañía de su familia y (si los tiene) con sus hijos, que usted no me dejará mentir, son lo que más se ama en la vida y a quienes “no queremos que les dé ni el sol”… yo reconozco ese amor de padre y sé también que lo puedo dar, porque ya lo recibí, es un amor desmedido, que todo lo da y todo lo puede. Con todo respeto.
Dr. Héctor Patiño Rubio
Tequila, Jalisco
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