El más reciente logro de Santiago

Y finalmente, me acaba de llegar el momento de la nada...

Estaba yo aquí, sentada, frente a la compu. Tranquila. Poniendo una mensada en twitter sobre mi mal humor y llegó Sampi gritando. Yo con mi mal humor le dije: "ay, Sampi, dame espacio!" Y me vió con ojotes de urgencia. Se jaló el pantaloncito por detrás y volvió a gritar: "Mami!" Cabe agregar que solo grita Mami cuando está desesperado. Si no, no le da importancia a poner el mote adecuado en la madre a la que se dirige.

Voltié a verlo y de forma más vehemente y quizá (lo admito) menos cordial, le dije "Santiago, Mami está enojada, ahorita déjame en paz!"

No se inmutó y tan firme como es él a sus 23 mesesitos me dijo: "Mami, mía, popó!" Y algo dentro de mí reaccionó. Msi sentidos estaban alertas y no detecté ningún cambio de aroma relevante. Le pregunté: "¿Estás haciendo popó?" Y me dijo que no. Le insistí: "Entonces, ¿quieres hacer popó?" "¡Sí!" Y empezó a dar vueltas en círculos feliz de que lo huebiera entendido, gritando popó popó.

Solo por curiosidad, y todavía aplatanadota en mi silla frente a la compu le pregunté: "¿Quieres hacer en el baño?" "¡Siiií!" y salió corriendo rumbo al baño de nuestro cuarto que es donde desde hace meses tenemos un banquito y un adaptador "por si se les antojaba usarlo" pero que en realidad no hemos promocionado muy activamente.

Me gustaría ahorrarle los detalles, pero les estaría ocultando la mitad de la historia. Después de todo es la primer caca de mi hijo en un excusado. Resulta que obvio el control de esfínteres todavía no es excelente así que después de todo el interrogatorio, para cuando logré bajarle el pantaloncito y quitarle el pañal, ya "habíamos empezado" como quiera lo senté y él se puso a pujar profesionalmente (siempre ha sido medio estreñidito). Por alguna de esas extrañas razones de la vida que no logro entender, era obvio que yo no estaba preparada, así que tuve que dejar al niño solo un segundo mientras corrí por el pañal y una sillita para el porrista que preguntaba "¿tas bié Tati? Pue'e?" Llegué y Santiago seguía pacientemente en su adaptador esperando a que todo saliera como debía. Entonces salí corriendo de nuevo por las toallitas húmedas, just in case.

Por su puesto para cuando volví ya había acabado, lo bueno es que apenas se estaba disponiendo a bajar así que no lo encontré haciendo más mugrero del necesario.0

La verdad que el desastre lo hice yo con la embarradera de pañal y toallitas. Y en un descuido Sampi decidió que no perdiera el tiempo tirando pedacitos de papel en el excusado, así que agarró el rollo completo y lo tiró al retrete. En fin, creo que no había gastado tantos productos higiénicos en limpiar a uno de los bebés, desde que eran recién nacidos.

Bueno, creo que para la próxima estaré más preparada y esto definitivamente marca un gran paso en el camino de Santiago hacia la independencia.

***Nota: La foto es vieja, pero finalmente me quedó bien con el contenido! Aunque por coincidencia sí trae la misma camiseta hoy!