martes, abril 12, 2011

Novena entrega

Esto de ser mamá no es sólo una cosa de no mames no mames no mames.
Estoy muy cansada. Trato de instaurar una rutina y hacer de este pedazo de casa un lugar habitable para mis hijos y es una tarea titánica. La cosa hasta ahora va más o menos así. Yo me levanto con Ana a las 5:30. A las 6:00 regreso y me pongo a escribir, aunque algunos días me pongo a navegar por internet. A las 7:00 levanto a los tiagos. A las 7:30 meto a uno a bañar y a las 7:45 al otro. A las 8:10 salimos de casa. A las 8:30 entran a clases. Se supone que salen a las 11:45 pero hay días como hoy que les dan salida temprano, a las 10:30.
Desde el viernes no hay tele en esta casa. Es el castigo de Diego y Santiago por meterse al cuarto de Mamá y Mami a hacer destrucción masiva. No sé cuál sea la idea de Ana respecto a este castigo pero a mí me gustaría que no vieran tele hasta después de 28 días para que se les quite la maña. Hoy los senté en la mesa de la cocina mientra yo preparaba la comida, se pusieron a pintar con acuarela.
Como estamos en la onda del radio y el trato fue que nos ayudaran a cuidar a un hijo, nos turnamos el día. Ayer le tocó a Diego y hoy le toca a Santiago. Es positivo porque, al menos yo, dedico el tiempo que hacemos de casa al centro para platicar con el niño en turno. El famoso tiempo de calidad, supongo. 
Ayer el abuelo se compadeció de Santiago y lo llevó a sus vueltas. Hoy invitó a Diego a que lo acompañara al taller. Quiero pensar que eso fortalecerá los lazo individuales de todos con todos. Pero no es fácil porque implica mucho trabajo y mucho esfuerzo.
Ayer, de regreso a casa, Ana me preguntó: ¿Crees que vas a poder con esto? Y sentí como cuando los maridos le preguntan a sus esposas si creen poder con el trabajo sin descuidar la casa. Dudo que Ana lo haya preguntado en ese sentido, pero yo de todas maneras lo sentí así. Le dije que tenía que tomar el riesgo. Ella me contestó: ¿Segura? Implica hacer más comidas con menos dinero, al menos en lo que el programa empieza a tener patrocinios, me contestó.
Confieso que me puse histérica. El tema del dinero es un gran tema, sobre todo ahora que debemos reunir lo suficiente para iniciar el proceso de adopción de Diego y Santiago.
Mientras tanto continuaré con los proyectos, trataré de no estresarme y trataré de divertirme mucho. Esta es precisamente la letra pequeña del contrato de ser madre: A veces parecen que las cosas se complican aunque muchísima gente alrededor tuyo te esté echando la mano.
Pero no me awito. Seguimos en la lucha.
Y por favor, no dejen de escucharnos en WIK, de lunes a viernes, 6 de la tarde, hora central de México.

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