Mi hijo, sin pelos en la lengua.
Pues la 4ta Semana Lésbica Cultural VISIBILIDADES estuvo muy bien, muy adecuada según sus objetivos, como ya lo había relatado con anterioridad. Pero no me dejó en paz toda la semana la espinita del adultismo del cuál YO misma me he vuelto tanto víctima como victimaria.
El último día decidí huir. Era el sábado de exposiciones y además de diferencias políticas, estaba yo harta de guardias de seguridad mal encaradas viendo feo a mis hijos por experimentar la vida a la que tienen derecho. Así que estaba dispuesta a no ir a ningún evento y me fui a casa de Manuel y Elva porque iba a haber un ciclo de cine en su casa. Al final, después de que yo barrí, claro, los invitados nos dejaron plantados. Por ende nos vimos ante la tarea de entretener hijos.
Crix como quiera iba a ir a la exposición, por lo cual Manuel sugirió ir todos, hacer acto de presencia e irnos a pasear a una plaza con los niños. Eso hicimos. La idea eara que sólo Crix y yo bajáramos del coche y en 5 minutos regresáramos para irnos. Sin embargo, al llegar notamos que todavía iban a la mitad de la conferencia magistral y tuvimos que esperarnos a que acabara para la exposición de arte.
Aprovechamos para saludar a Yan María y eso me puso relativamente de mejor humor, pero una guardia de seguridad regañó a mis hijos, lo cual me puso semi histérica. Eso aunado a mi desaprobación de la exposición (que por lo demás quedó rechula).
Así que salí del lugar hecha una furia y le pedí a Manuel que manejara al infinito y más allá, lejos, lejos de allí. Aproveché todo, toooodo el camino por Colón hasta Plaza Real para despotricar a gusto. Me quejé amargamente de lo solidarias que yo recordaba a las lesbianas en el DF y lo antisolidarias que son por acá a veces con respecto a los hijos (algunas, obvio no todas). Finalmente casi acabando, me dio por gritarle al mundo que Monterrey es una ciudad loca donde recibo más apoyo de los compañeros gays que de las compañeras lesbianas feministas.
--¿Qué !("/·&$%=*¿¡ pasa con esta ciudad dónde los gays son más solidarios con las lesbianas que las propias lesbianas? ¿Cómo puede ser posible que Mario entretenga a Diego, que Carlos los cargue y los haga reír, que Rubén juegue con ellos y Heriberto entretenga a Santiago y los lleve a pasear? ¿Qué pasa con el activismo en Monterrey? ¡Nada en Monterrey funciona como debería! ¡ESTA CIUDAD NO FUNCIONA!
--¡Sí funciona, Mami! -- contestó enfáticamente Diego, que creo que ya es más regiomontano que yo.
Pues la 4ta Semana Lésbica Cultural VISIBILIDADES estuvo muy bien, muy adecuada según sus objetivos, como ya lo había relatado con anterioridad. Pero no me dejó en paz toda la semana la espinita del adultismo del cuál YO misma me he vuelto tanto víctima como victimaria.
El último día decidí huir. Era el sábado de exposiciones y además de diferencias políticas, estaba yo harta de guardias de seguridad mal encaradas viendo feo a mis hijos por experimentar la vida a la que tienen derecho. Así que estaba dispuesta a no ir a ningún evento y me fui a casa de Manuel y Elva porque iba a haber un ciclo de cine en su casa. Al final, después de que yo barrí, claro, los invitados nos dejaron plantados. Por ende nos vimos ante la tarea de entretener hijos.
Crix como quiera iba a ir a la exposición, por lo cual Manuel sugirió ir todos, hacer acto de presencia e irnos a pasear a una plaza con los niños. Eso hicimos. La idea eara que sólo Crix y yo bajáramos del coche y en 5 minutos regresáramos para irnos. Sin embargo, al llegar notamos que todavía iban a la mitad de la conferencia magistral y tuvimos que esperarnos a que acabara para la exposición de arte.
Aprovechamos para saludar a Yan María y eso me puso relativamente de mejor humor, pero una guardia de seguridad regañó a mis hijos, lo cual me puso semi histérica. Eso aunado a mi desaprobación de la exposición (que por lo demás quedó rechula).
Así que salí del lugar hecha una furia y le pedí a Manuel que manejara al infinito y más allá, lejos, lejos de allí. Aproveché todo, toooodo el camino por Colón hasta Plaza Real para despotricar a gusto. Me quejé amargamente de lo solidarias que yo recordaba a las lesbianas en el DF y lo antisolidarias que son por acá a veces con respecto a los hijos (algunas, obvio no todas). Finalmente casi acabando, me dio por gritarle al mundo que Monterrey es una ciudad loca donde recibo más apoyo de los compañeros gays que de las compañeras lesbianas feministas.
--¿Qué !("/·&$%=*¿¡ pasa con esta ciudad dónde los gays son más solidarios con las lesbianas que las propias lesbianas? ¿Cómo puede ser posible que Mario entretenga a Diego, que Carlos los cargue y los haga reír, que Rubén juegue con ellos y Heriberto entretenga a Santiago y los lleve a pasear? ¿Qué pasa con el activismo en Monterrey? ¡Nada en Monterrey funciona como debería! ¡ESTA CIUDAD NO FUNCIONA!
--¡Sí funciona, Mami! -- contestó enfáticamente Diego, que creo que ya es más regiomontano que yo.
1 comentario:
Hola, traté de poner este comentario en otro post, pero no se pudo, no sé por qué, igual, es aplicable. Se los djeo con mucho cariño.
Aquí yo de metiche, Ana, y esperando no ofenderte:
Es cierto, desde el adultismo imponemos cantidad de cosas en los niños y niñas y no es justo ni les educa en la justicia. Es cierto también que gritarles o pegarles lo único que les enseña es a imponer sobre los otros y otras con gritos y golpes, que la espiral de la violencia que se siembra de ese modo es temible y que no habría por que perpetuarla. Sin embargo, sólo tengo una observación al respecto: dejar que dos niños griten, brinquen, exijan, pasen por encima de los demás no es novedoso, generalmente a los varones se les permite eso, con otros argumentos más masculinizados, pero el resultado es ese. Me parece y es mi punto de vista muy personal que además de combatir el adultismo y la violencia contra los niños es tarea imprescindible en la crianza enseñar a los niños y niñas desde muy pequeños a la empatia, a sentir e interesarse por lo que sienten y necesitan los otros y las otras. Por ejemplo, si gritas e interrumpes a una persona hablando, le estás diciendo que no te interesa lo que dice, si tus gritos no dejan escuchar a otra persona, si cuando corres atropellas a alguien puedes lastimarle, etc. Es importante mostrarles que sus necesidades son valiosas, pero también es importante mostrarles que las necesidades de los otros y otras también son valiosas y es importante tenerlas en consideración. Conciliar el cuidado y satisfacción para uno/una y los cuidados y satisfacción para todes es una forma de construir otras formas de organizarnos. Esa es mi propuesta. Les mando un abrazo.
Karina
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